“Furtar es un fotozine hecho por almas latinoamericanas que no conocen fronteras”, escriben los chicos en su página de Facebook y ahí están, me parece, los ejes de una política que, siempre fiel al DIY, se articula como una inquietud, una necesidad por registrar(se), por hacer circular el underground en forma de imágenes que parecen decirnos: “hey, el hardcore tiene para rato y goza de excelentísima salud”. Hasta el momento cuentan con dos números editados en formato físico –con distribución en Chile y Brasil–, un sitio web en construcción (www.furtar.org) y colaboradores a lo largo y ancho de toda Latinoamérica que, además de fotografiar tocatas, narran la ciudad, su cotidianeidad y avatares.
01/11/2015