25/11/2015

Umbral, de Victor Micoud

Josefina Jaureguiberry

Blog | reseñas

 “El espacio y el tiempo. El tiempo y el espacio. Dos categorías que sirven para explicar toda la realidad, dos coordenadas que se entrecruzan para decir un algo antes indefinido, inexistente”  

                  Georges Perec Victor Micoud

Victor Micoud

Victor Micoud

Victor Micoud

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Victor Micoud

Victor Micoud

Nos encontramos ante el desafío de pensar las ciudades en las que queremos vivir. Buscar nuevas formas de habitar el espacio nos remite a la necesidad primera de entender de qué manera se ha venido imaginando y construyendo la ciudad en las últimas décadas. La planificación urbana entendida como zonificación y clasificación ha generado una respuesta que se fundamenta en el desarrollo de proyectos pensados para un habitante promedio; en otras palabras, se intenta homogeneizar el espacio de tal manera que sea capaz de albergar la mayor cantidad de formas de vida. Esta búsqueda de homogeneización, sin embargo, va de la mano de un relato ilusorio de diferenciación. La ciudad global se sustenta en un discurso que apela a las individualidades y a la capacidad de cada uno de construirse a sí mismo y a su entorno. Al aceptar que este modelo se basa en la generación de un espacio neutro, en el que las diferencias son de-codificadas y asimiladas, no se puede evadir que se está adoptando una concepción ideológica.

El trabajo del fotógrafo francés Victor Micoud se pregunta por estas lógicas y busca plasmar el intento urbanístico de racionalizar el comportamiento de un supuesto habitante medio. A través de fotografías tomadas en la periferia urbana de París, se muestra la construcción de un espacio ascético y estéril. La estética simétrica y limpia de las fotografías nos habla del intento de ordenar las interacciones y anticipar los usos que se darán en el lugar. Sin embargo, se puede ver que éstos pasan a ser escenarios de posibles actividades que no llegan a ocurrir. El espacio se construye en función de proyecciones del futuro deterministas, basadas en conceptualizaciones presentes. Micoud muestra la zona de urbanización denominada Marne-la-Vallée desprovista de habitantes que moldeen el territorio, fomentando la idea del desencuentro en contraposición a la autenticidad y vitalidad que podrían entregar las personas en la imagen.

Los recorridos, los itinerarios y las funciones del territorio responden en gran medida a la historia, los usos y los deseos que en él ocurren. El desarrollo de un área urbana en meros términos racionalistas deja de lado la idea de que es la relación entre el cuerpo y el espacio la que produce el ambiente urbano. Puesto en otras palabras, la noción dialéctica de la producción del espacio, en la que el cuerpo interacciona con él, lo modifica y lo produce, a la vez que el territorio lo hace sobre los cuerpos, es supeditada o no tomada en cuenta por el desarrollo inmobiliario neoliberal. La organización del territorio en áreas periurbanas parisinas se genera en un espacio que antes estaba destinado a la agricultura. Se da un proceso de construcción-deconstrucción que no considera las lógicas preexistentes. Incluso, los espacios verdes que se pueden ver en las fotografías son construidos bajo lógicas utilitaristas; no son espacios naturales, sino una ilusión de naturaleza. La misma gama de colores nos invita a pensar en la uniformidad y artificialidad del ambiente.

Las fotografías muestran cómo un sector urbanizado con menos de 30 años genera la necesidad de crear un relato artificial. Esto se condice con la idea de que el poder de las formas urbanas radica en su capacidad de incorporar criterios de valor difundidos por los medios masivos de comunicación. Al apelar a un gusto masificado, se busca generar una identificación con un modo de vida y un perfil de persona que funciona como publicidad del lugar, y que lo dota de cierta identidad. El epicentro de este fenómeno en las fotografías de Micoud es el centro comercial “Vallée Village”, un outlet situado en las cercanías de Disneyland Paris que atrae a miles de turistas de todo el mundo. Este lugar se caracteriza por imitar estéticamente a un pueblo donde las personas pueden recorrer tranquilamente sus calles mientras realizan sus compras. Los visitantes extranjeros se cruzan con locales teniendo como única base de encuentro los mismos hábitos de consumo. Es entorno al centro comercial que se estructura una identidad urbana que actúa como contexto y punto de referencia.

En última instancia, el trabajo de Micoud nos plantea un problema fundamental comúnmente banalizado: las personas no están siendo incluidas en la forma que se está construyendo la ciudad. Por el contrario, se están generando territorios que responden a fines utilitaristas relacionados a los capitales privados. Esto se traduce en que muchas veces el espacio público no deja lugar para la iniciativa individual ni colectiva. Se da un lugar predeterminado con poco espacio para la construcción social que refleje sus historias, culturas e individualidades. Umbral nos habla de lugares deslocalizados, ciudades construidas desconectadas de sus contextos; un urbanismo que busca estandarizar los modelos de vida que normalmente se plasman en el cómo construimos el habitar. Las fotos hablan de un lugar que se podría encontrar en cualquier ciudad del mundo, planteamiento que se transforma en problemática en cuanto se entiende como un fragmento de ciudad construido de manera atomizada, desconectada de su entorno y sus posibles habitantes. La diversidad caótica debería ser, por el contrario, la encargada de generar espacios de encuentro. En otras palabras, asumir que la ineludible tensión entre diversidades es el sustento de un orden complejo y emergente.

 

 

 

Josefina Jaureguiberry es egresada de ciencia política de la Universidad Católica de Chile. Actualmente se encuentra trabajando como consultora del Programa de Desarrollo Local de CIPPEC (Buenos Aires, Argentina).

Victor Micoud es un fotógrafo francés radicado en París. Sus múltiples viajes, incluyendo largas estadías en Chile, han sido fuente de inspiración para su proyecto fotográfico. En el último tiempo se ha enfocado en el tema del desarrollo urbano en las áreas periféricas de París y sus implicancias sociales.